Rosemary Newball-Taleton marca el paso en la música cristiana

Actualmente labora como A&R en la disquera de música cristiana mas importante del mundo con salmistas latinos que marcan la pauta en este género musical.

Por Daniel Newball

El haberse ido de su tierra le produjo todo tipo de sentimientos encontrados a Rosemary Newball-Taleton. Desde la tristeza de la lejanía de su familia, aunque ya sabía lo que era vivir por fuera por sus estudios universitarios y el solo  hecho de haber nacido en los Estados Unidos.

Encontró el amor, una familia y el éxito de estar entre los grandes salmistas de la música cristiana en una posición de privilegio en la industria musical como lo es la gerencia de producción de Integrity Music, la disquera de música cristiana más importante del mundo.

Nombres como el de Danilo Montero, Christine D´Clario, Ingrid Rosario, Julissa, Daniel Calvetti, Don Moen, la agrupación Blest y Marcos Witt son apenas unos nombres de los que ya están familiarizados con esta isleña que se encarga de trabajar de manera meticulosa en la selección de todos los temas musicales que serán lanzados ya sea en un sencillo o un álbum.

Con el ingrediente adicional que estos artistas ya no trabajan directamente con las disqueras en su promoción, es decir, ya no usan acetatos ni discos compactos para promocionar su música sino las plataformas digitales o espacios virtuales donde los amantes de la buena música descargan desde el internet.

Y es que para esta isleña para los artistas es imperioso que sepan cómo lograr sus ganancias a través de las plataformas digitales para evitar ser explotados o hurtados en su buena fe luego de un proceso creativo que lleva años poder consolidar en una canción y para ello se les brinda una asesoría que es vital para lograr el objetivo de vivir de su trabajo.

“Mi trabajo es prácticamente lograr que las canciones de los salmistas con los que trabajo estén sonando, pero además que ellos puedan ganar las regalías que les corresponden por su creación.

“Es necesario que sepan cuáles son las plataformas que son más rentables, aunque todas las son, y también que tipo de canciones hay que ir haciendo para poder gustar en el mercado. Es necesario saber cuándo una canción debe empezar a sonar y cuando no para evitar saturar a las audiencias y que sean desplazados en su creatividad.

“Ese es prácticamente mi trabajo, viajo constantemente entre Dallas, Houston, Nashville, Miami y Santo Domingo, lo hago de modo que pueda asistir a mis artistas tanto en la producción de sus discos como en la promoción y la realización de sus conciertos”, afirma Rosemary que aún recuerda cuando estuvo en agrupaciones musicales en su etapa de colegio como la Banda Juvenil de Músicos, dirigido por el maestro Octavio Quintero.

Hoy, cuando ya cumple más de 10 años en los Estados Unidos ejerciendo su trabajo, para ella el balance es simplemente satisfactorio, ve con buenos ojos el producto de su trabajo y espera algún día poder volver a la isla en el momento que le corresponda su retiro.

Actualmente casada y con un hijo de seis años, Rosemary aspira a seguir cosechando mas éxitos en un país de muchas oportunidades pero donde solo con calidad se logra conquistar públicos de forma exitosa y permanente.

«Hoy vivo con mi esposo y mi hijo, él trabaja como ingeniero de sistemas y gerencia una cadena de almacenes cuando lo conocí. Hoy llevamos más de 15 años de matrimonio y no puedo quejarme ya que Dios se encargó de presentarme al hombre indicado», dijo Rosemary.

«Él es mi apoyo y nos esforzamos cada día por sacar adelante nuestro proyecto de vida juntos”, concluye Rosemary que desde ya anuncia una gira con sus artistas para el 2022, trabajan en la producción de los temas y el montaje de los conciertos para nuevamente llevar al séptimo cielo junto a sus salmistas a los amantes de la música cristiana.

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